Por: Lic. Amable Guzmán
Nos llama
poderosamente a la atención, cuando accesamos un medio informativo y vemos con
asombro sus noticias; aquella de que muchas compañías de seguros para vehículos
de motor, no ofrecen este servicio para una determinada marca y modelo, usando
la expresión de carros basura.
Esto comienza con
una serie de errores de parte de las propias autoridades, pues hay que ponerle control a aquello, que entra
por los puertos del país y la autorización de dar entrada, debe reunir las
exigencias mínimas, para que a la llegada de estos medios de transporte sea
para ayudar a resolver un problema y no
a empeorar la difícil situación vial de la República Dominicana; pues
cuando una agencia importa estas unidades e inicia la venta, el problema se
multiplica a dimensiones extraordinarias, creando daños de magnitudes
agigantadas.
La condición de
basura, es porque su vida útil está muy deteriorada, por la acumulación de
kilómetros que ha recorrido; entonces después de haber tenido un tiempo de uso
prolongado, es vendido a países como el nuestro; entrando a dar servicio en
nuestras calles; pero realmente es algo que a la vista está en buenas
condiciones, pero en buen dominicano está explotado, como en los viejos tiempos
se usaba un refrán de que era un cuero vestido de seda; cuando un vehículo era
desabollado y pintado; en alusión de que se ve bien y bonito; pero los años y
el tiempo de uso, no se le quita; lo que evidentemente produce serios daños,
que son irreversibles a los tiempos actuales.
Mientras los demás
países están poniendo reglas de exigencias a los fabricantes, a la hora de
vender sus productos, estos deben de tener una serie de elementos propios de la
seguridad, a fin de que sea la condición más importante al tener cualquier tipo
de accidente.
Muchos de esos,
que las compañías de seguros llaman basuras, no tienen ni siquiera una bolsa de
aire; mientras cualquier vehículo hoy en día además de la del guía para el
conductor, que fue la primera bolsa que se instaló y luego la del pasajero, hoy
están distribuidas por todo el interior, pasando de diez bolsas en totalidad;
pero las exigencias de los países y del propio fabricante es que ya le están
poniendo este elemento de salvar vidas hasta en la parte exterior; protegiendo así
al peatón.
Es penoso que
mientras las exigencias internacionales están apostando por mayor seguridad por
la parte especifica de colocar la mayor cantidad de bolsas de aire en los
automóviles; aquí en nuestro país, están dejando entrar aquellos que no tienen
ni una sola bolsa de aire; creando esto un gran problema, por el caso de la
seguridad. Pues vemos a cada rato accidentes que se vuelven catastróficos y de
muertes por la misma razón; pues además de la imprudencia humana, se le suma la
condición de vida útil, que se cree que esta en óptimas condiciones, pero hay
ya un degaste en el mismo producto del uso prolongado de haber recorrido miles
de kilómetros.
He escuchado por
ahí, que el Corea el país de origen de estos automóviles, al mandarlo hacia a América,
le reducen las millas o kilómetros marcados; por lo que el uso es de mayor
envergadura y las consecuencias también. E-mail:
amable_guzman@hotmail.com
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