UNIÓN DOMINICANA
DE PERIODISTAS POR LA PAZ, INC. (UDPP)
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DECLARACIÓN
SOBRE EL GOLPE DE ESTADO “CONSTITUCIONAL”
EN EL PARAGUAY
La Unión Dominicana de
Periodistas por la Paz, Inc. (UDPP), condena enérgicamente el golpe de estado “constitucional”
que acaba de dar el Congreso de la República del Paraguay al presidente de ese
país, Fernando Lugo y advierte que, desde el reinicio de esta criminal práctica imperialista en el año 2009 en contra
del presidente de Honduras Manuel Zelaya, y ya antes, con Jean Bertrand
Aristides, en Haití, otros golpes han sido fraguados, si bien han fracasado,
con miras a destruir la Unasur y los demás esfuerzos serios de integración latinoamericano
y caribeño en curso. Ejemplo de esto es el caso del presidente Rafael Correa
del Ecuador, agredido físicamente por policías amotinados con la intención de
matarlo, y de Evo Morales de Bolivia, donde grupos políticos internos en
contubernio con el imperialismo realizan “marchas” para desestabilizar el
gobierno y provocar trifurcas entre los agentes del orden y los marchistas y
así producir los muertos necesarios como para lograr “la destitución” por parte
del Congreso del presidente Morales.
La UDPP cuestiona ampliamente la
legitimidad de la ultra burguesía
paraguaya, aliada con el partido “liberal”, y estos con los tentáculos del
poder imperial, para sacar del poder a
un hombre cuyo único pecado ha sido querer transformar esa hermana nación, de
un país rural a uno moderno, con equidad y justicia social. Lugo quiso repartir
la tierra entre los campesinos. Ese es un pecado que una burguesía rancia no
puede perdonar. Ella pudiera llegar a perdonar,
incluso, hasta el narcotráfico y el robo de los fondos públicos, pero jamás que
los pobres accedan a las riquezas que ella les roba.
Nuestra organización llama a
todos los pueblos libres de América y el mundo a movilizarse en repudio del
nefasto golpe de estado “constitucional” en contra del ciudadano presidente del
Paraguay, Obispo Fernando Lugo, y exige una investigación profunda a fin de
determinar quiénes están detrás del criminal atentado en contra de la
democracia y la paz social, cometido contra un presidente legítima y
libérrimamente elegido por un pueblo
que aspira a vivir en paz con dignidad.
Felicitamos al gobierno de la República
Dominicana, en la persona de su Presidente, el Dr. Leonel Antonio Fernández
Reyna, quien ha dicho que no reconocerá el gobierno del señor Federico Franco. No compartimos, sin embargo, el llamado hecho
por este a la OEA para que intervenga en el asunto, puesto que esta entidad
solo ha servido para patrocinar golpes de estados en nuestra América a lo largo
de su historia. Igualmente felicitamos a todos los gobiernos de América y el
mundo que han declarado que no reconocerán al gobierno de Franco y les
invitamos a mantenerse firme y no dejarse vencer por los tentáculos y las
garras imperialistas organizadas en la tristemente célebre OEA, la cual ha
dicho por boca de su Secretario General José Miguel Insulza, que no puede hacer
nada en el caso del Paraguay y que debe resignarse a aceptar como bueno y válido
el criminal golpe de estado. Hacemos un fervoroso llamado a todos los
parlamentos de América para que suscriban la actitud del Parlamento
Centroamericano que ha condenado la destitución del presidente Lugo.
Nuestra institución se une a los
millones de voces del Paraguay y del mundo que reclaman el retorno a la constitucionalidad,
es decir, la vuelta al poder de su legítimo presidente, el señor Fernando Lugo.
¡No al crimen político organizado desde las entrañas mismas de un Congreso antidemocrático
e impopular, cuyo único interés es restablecer el status quo anterior en
beneficio y provecho de un reducido grupo de personas que siempre se ha
beneficiado de la corrupción y el robo de la cosa pública en perjuicio de la
nación hermana del Paraguay!
La comunidad internacional no
debe reconocer el nuevo “gobierno” paraguayo y sí debe aislarlo para que sienta
el rigor del castigo por su hecho ilegítimo. El golpe de estado constitucional
se veía venir desde hacía mucho tiempo. A decir verdad, la burguesía paraguaya
asumió la conspiración como un acto de fe, desde el momento mismo de la
asunción al poder del presidente Lugo, cesando un poco el plan, mientras él
estuvo afectado del misterioso cáncer que afecta a varios mandatarios de los
países progresistas de nuestra América Latina.
Es evidente que detrás de ese golpe de estado “constitucional” se
esconde la mano tenebrosa imperialista, la que, junto a la ultra burguesía
reaccionaria paraguaya procura arrebatarle al pueblo las grandes conquistas
obtenidas durante los años de gobierno del presidente Fernando Lugo.
¡Viva la democracia! ¡No al
retroceso!
Moca, provincia Espaillat,
República Dominicana, a los 26 días del mes de junio del año 2012.
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