Por Florencio Ml.
Tejada
En los
últimos años se ha visto la desaparición de diversas actividades realizadas por
la industria a nivel mundial lo que ha dado al traste con la extinción de
algunas de estas. Vemos que el reloj de cuerda, la máquina de escribir, las
cámaras fotográficas que usaban rollos, el esténcil (usado como fotocopiadora),
del cassette, del long play y tantos productos de uso común, que el amigo
lector puede añadir a esta lista han desaparecido.
Lo
mismo viene pasando con las profesiones o actividades laborales. Quién oye
decir a alguien “yo soy mecanógrafo o taquígrafo”, quien oye hoy hablar del
telefonista, la persona que desde una central telefónica hacia las conexiones
que se realizaban fuera de la ciudad, siga añadiendo actividades, pero como
dice la canción que interpreta Mercedes Sosa “Cambia lo superficial, cambia
también lo profundo, cambia el modo de pensar, cambia todo en este mundo” y
dentro de esos cambios está la profesión contable.
Ya no
se oye hablar del tenedor de libros, aquel técnico que también se conocía como
auxiliar de contabilidad y entonces se llega al profesional de la contaduría.
Pero como todo cambia, las empresas están contratando a capturista, es decir,
aquellas personas que toman los datos originales y lo convierten en legibles
para la computadora.
Se
estima que en un período de alrededor de diez años la profesión contable tendrá
una significativa baja, aunque está claro, hay cosas que la máquina no podrá
tomar en cuenta por lo que viene es que el contador no debe ser un registrador de
datos sino un analista de estos.
Para
que se tenga una idea de cambios, ¿cuántas personas eran suficientes en un
departamento de facturación, o cuentas por cobrar o pagar?, una simple pregunta,
¿conque cantidad se hace ahora? La llegada de lo electrónico cambió todo. Los
sistemas contables cada vez son más sofisticados, hacen más cosas, se
perfeccionan y esas herramientas contribuyen a que en las empresas cada día la
cantidad de contadores sea menor.
No
obstante, es necesario saber que, si todo va la mecanización, a la
automatización, a lo tecnológico, es bien sabido que alguien debe “punchar” la
máquina por lo que ha de entenderse que hablar de una desaparición total no
sería el término correcto, sino que, en lugar de desaparecer, la actividad contable
se transformará dando un giro de 180 grados con el fin de enfocarse hacia
nuevos objetivos y profesionales analistas financieros tendrán un espacio
significativo en las empresas.
El
objetivo de la contabilidad de cuantificar, medir y analizar las operaciones
realizadas en una organización para tomar la mejor decisión que cumpla con los
objetivos de las empresas no va a cambiar y eso lo realizará el profesional que
haya migrado a los nuevos cambios.
No obstante,
contador en la especialización en el de los análisis de los Estados Financieros,
no debe olvidar en involucrarse en lo impositivo impositiva, en la auditoría,
área en la que el contador tiene que especializarse y que cada día adquiere
gran demanda.
Soy
humano, por lo que puedo equivocarme, razón por la cual prefiero errar y como
contador, que el contador sea un ente cada vez más importante en la empresa.
Soy humano,
por lo que puedo equivocarme, razón por la cual prefiero errar y como contador,
que el contador sea un ente cada vez más importante en la empresa.
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